Las donaciones del זהב son llamadas de forma distintiva, diferente a la forma de expresar las demás donaciones. En vez de llamar a los donativos de זהב, una תרומה la cual es la forma en la que la Torá se refiere a las donaciones del cobre y de la plata , las donaciones del oro son referidas como una תנופה – una ofrenda de agitar. ¿Por qué la Torá llama el donativo del oro como תנופה?

El concepto de una תנופה, como Rashi lo explica en parashat Tetzave, es que a través de agitar (תנופה) el objeto hacia todas las cuatro direcciones, uno está enseñando que todas las direcciones pertenecen al Bore Olam. La תנופה es una expresión que donde sea que estemos y a donde sea que vayamos, siempre estaremos en el territorio que está bajo el dominio de Hashem.

El donar oro tiene un reto especial y único, más que el donar los demás metales preciosos. La diferencia es difícil de expresar de forma lógica, pero nos podemos identificar de forma emocional con la dificultad distintiva de separarnos de nuestro oro. Con otros metales preciosos y demás artículos de valor nos relacionamos de acuerdo a su valor en el mercado, sin embargo, el oro tiene cierta atracción que va más allá de su valor práctico. Nos relacionamos de forma emocional con el oro como la materia esencial de la riqueza. Esto significa que dar oro de tzedaká es un reto que no tenemos con los demás metales ni propiedades.

La Torá reconoce este reto especial y a la vez nos indica cómo los donadores del Mishkan fueron capaces de superar esto. Es por esto que el pasuk nos dice que ellos dieron oro como una תנופה – una ofrenda de agitar. No era una forma normal de donación, sino algo que provenía del reconocimiento de que este mundo no es de nosotros. El dueño real de todo lo que se encuentra en los cuatro vientos es el verdadero Maestro del Universo.

Si nosotros pensamos que somos dueños de riquezas, será casi imposible que nos separemos de nuestro oro. Pero cuando hacemos תנופה con este, nos podemos conectar con la realidad de qué solos somos los dueños imaginarios y que la verdad es que nuestras posesiones están aquí para que las usemos en la forma en la que el Dueño real quiere que las usemos.

La forma de la Tora de dar tzedaká no está basada solamente en la voluntad de separarnos de lo que es nuestro, sino de tener la perspectiva correcta sobre el mundo en el que vivimos, viendo cada acto de tzedaká no como el dar algo que es nuestro, sino como el cumplimiento de la voluntad del verdadero Dueño.